sábado, 7 de febrero de 2009

Sabato madrileño

Un nuevo sábado ante nosotros. Frío, pero soleado, un auténtico sábado de febrero en nuestra vida madrileña: mañana de baloncesto, tarde de compras mientras los niños están en su club, noche de peli en casa...
Y en mi vida romana, ¿cómo sería un sábado como éste? Supongo que no muy diferente: los niños tendrían sus actvidades en los colegios, parroquias, etc., como hacían tanti anni fa nuestros amigos de la Via Tiburtina.
La diferencia es que en Roma nuestros paseos vespertinos nos llevarían a buscar el tramonto desde algún Lungotevere, o a callejear mirando los anticuarios de Via Giulia, o a pasear por Frattina o Condotti tras haber tomado un café en el Greco. Y así va pasando la tarde, morosa, cualquier sabato pomeriggio.

No hay comentarios: