Es fin de semana,no hay nada urgente que hacer. ¿Por qué no darnos el gusto de tomar un brunch en esta mañana morosa y lenta? Ya es casi la hora.
Os propongo ir a un sitio especial, uno de nuestros últimos descubrimientos: el café del Chiostro del Bramante. Se lo debemos a Romano, buen amigo, magnífico guía y exquisito gourmet, que nos enseña su Roma particular, que con mucho gusto hacemos nuestra.
Animaos a visitar el chiostro, pero, chisst, que no se corra mucho la voz, porque su valor está precisamente en lo que tiene de secreto: hay muchos romanos que ni siquiera saben que existe...
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Hace 11 años
1 comentario:
Simplemente me gustaría comentaros que,además, Santa Maria della Pace es un clarísimo ejemplo de lo que se ha dado en llamar la "escenografía barroca", es decir, esa idea de que la vida es el Gran Teatro del Mundo y, por lo tanto, nuestros actos suceden en un magniífico escenario que los arquitectos del período se encargaban de poner en pie.
La iglesia está flanqueda por dos arcos que permitían rodearla, como si de una moderna rotonda se tratara, de esa manera las "carrozze" podían detenerse ante su atrio, permitir el descenso de los asistentes a los oficios religioso, continuar su camino por detrás del edificio y salir por el arco contrario. Así, el tráfico no se interrumpía y la circulación era lo más fluida posible. ¿Os recuerda a algo?
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