martes, 15 de noviembre de 2011

Tarde de noviembre


Una tarde más, un día cualquiera, un martes de noviembre. Sin pena ni gloria, sólo con mucho trabajo. No me apetece hacer cena, y en mi vida romana, tampoco. Me siento mucho más tentada a salir a dar una vuelta. Y mi propuesta para hoy es algo sencillo: acercarnos a la Piazza del Fico y tomar un aperitivo en el Bar, un típioc after work romano que ha estado cerrado, por las obras de la plaza, durante varios años, pero que ha abierto de nuevo sus puertas. Un vino relajado, un poco de charla entre amigos, ver a la gente y dejarse ver después de horas de oficina... ¿Tienes hambre? Pues a la vuelta está Da Francesco o si lo prefieres, aún más fácil, vayamos hacia la Via del Governo Vecchio a comprar un trozo de pizza al taglio, y a comerlo por la calle, antes de subir a casa y dormirnos frente a la tele...

Decíamos ayer...

Tras semanas, meses incluso, sin postear, aquí estoy de vuelta. A pesar de que otras tareas ocupen mis energías, a veces muy mermadas, me niego a dejar morir este proyecto, mi blog, la recreación de mi vida romana. Llegó el otoño, una nueva temporada, un nuevo entrenador (español) para la Roma, cambios sociales, crisis política, ruina económica, lluvias torrenciales... pero Roma sigue, imperturbable, eterna. Y mi vida romana, también.